Este jueves 8 de agosto se registró un fuerte sismo de magnitud 6.9 en la costa sudeste de Japón. Unos segundos después, otro terremoto de 7.1 sacudió la misma área del país asiático, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos.
Después de los terremotos, las autoridades locales emitieron una alerta de tsunami. La Agencia Meteorológica de Japón pronosticó la posibilidad de olas de más de 90 cm a lo largo de la costa de Kyushu, la principal isla del sur de Japón, y también en la cercana isla de Shikoku. Como medida preventiva se solicitó a los residentes a evitar el mar y las áreas costeras hasta que se levante la alerta.
Ambos sismos se originaron en el mar, frente a la costa japonesa. El primero, con una magnitud de 6.9, tuvo lugar a 29 kilómetros al este-sureste de Miyazaki, a una profundidad de unos 33 km. El segundo, de magnitud 7.1, ocurrió 19 km al nordeste de Nichinan, a una profundidad de alrededor de 25 kilómetros, 55 segundos después del primero.
De acuerdo a la Agencia Meteorológica de Japón, se han registrado ligeros cambios en el oleaje desde los dos sismos y por esa razón se emitió la alerta de tsunami. Se estima que las olas alcancen hasta 1 metro de altura en la ciudad de Mizayaki.
Los operadores de las plantas nucleares en la región evalúan el estado de los reactores en las instalaciones de Sendai, en Kagoshima, e Ikata, en la prefectura de Ehime. Hasta el momento, no se han reportado anomalías relacionadas con el terremoto.
Daños después de los terremotos
En el aeropuerto de Miyazaki, donde el temblor se sintió intensamente durante aproximadamente 30 segundos, se rompieron algunas ventanas y el servicio aéreo se suspendió mientras se inspecciona la pista, según reportes del canal público NHK. Sin embargo, hasta el momento no hay heridos.
El mismo medio reportó un deslizamiento de tierra en un acantilado de la localidad de Shibushi y el colapso de una casa en Osaki, ambos en la prefectura de Kagoshima, aunque aún no se sabe si hubo heridos.
Además, se han interrumpido las líneas de trenes locales en Miyazaki y Kagoshima, y se han cerrado tramos de autopistas en la zona para realizar inspecciones.
