Un grupo de cinco personas armadas abrieron fuego este viernes 22 de marzo en el interior de la sala de conciertos Crocus City Hall en la capital de Rusia, Moscú, en un atentado que se adjudicó el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
Según informó la agencia de seguridad rusa hay por lo menos unos 60 muertos y más de 140 heridos, y se teme que las cifras crezcan en las últimas horas ante la gravedad de algunas de las víctimas.
El grupo jihadista «EI», se adjudicó la responsabilidad del ataque, según anunció en el sitio de mensajería Telegram donde tienen su canal, los combatientes “atacaron una gran reunión en las afueras de la capital rusa, Moscú”, dijo el grupo.
El gobierno ruso en cabeza de Vladimir Putin pronunció “sangriento atentado terrorista” al tiroteo en redes sociales.
Efectivos del Escuadrón Especial de Respuesta Rápida de la Guardia Nacional de Moscú se trasladaron inmediatamente hasta el lugar del ataque, mientras se dispuso de un dispositivo de seguridad para dar con los atacantes.
En el lugar del atentado se encontraban al menos unas 6.000 personas que participaban de un evento religioso cristiano.
