
El Frente Comuneros del Sur, una disidencia de la guerrilla del Eln que negocia la paz con el gobierno de Gustavo Petro, entregó casi 600 artefactos explosivos, que el presidente ordenó destruir en una zona montañosa en un acto público adelantado el sábado en Nariño.
El traspaso de 585 explosivos es un gesto de buena voluntad hacia la firma de la paz que promueve el mandatario con este pequeño grupo con el que negocia desde septiembre de 2024 como parte de su política de Paz Total, un acercamiento que ha molestado al Ejército de Liberación Nacional (Eln).
La entrega de material de guerra se formalizó en un coliseo de Pasto, capital del departamento de Nariño. Petro lideró el evento, al que asistieron diplomáticos, representantes de la OEA, de la Iglesia católica y del Eln.
Luego de una intervención de más de una hora, el mandatario dijo: «Anuncio la destrucción de armas, como comandante en jefe de las Fuerzas Militares de Colombia y siguiendo mi deber constitucional de garantizar la paz en todo el territorio. Le ordeno al capitán Víctor Paz (comandante del Grupo Marte de la Quinta División del Ejército) que proceda con la destrucción del material de guerra del Frente Comuneros del Sur». De inmediato apareció en una pantalla gigante la transmisión desde un área montañosa, donde estallaron 585 explosivos que traspasó el grupo insurgente a la Comisión de Paz.
La embajadora de Países Bajos, Reina María Buijs, calificó de «hito» la entrega del material de guerra en el proceso de paz, del que su país es garante.