El Gobierno colombiano autorizó formalmente el inicio de diálogos de paz con el Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). La decisión, plasmada en la resolución 257 del 2024 y firmada por el presidente Gustavo Petro, establece un «Espacio de Conversación Sociojurídico» para negociar con esta grupo.
El politólogo Álvaro Jiménez Millán fue designado como coordinador gubernamental para estas negociaciones, cuyo objetivo principal es lograr el sometimiento del grupo al sistema de justicia colombiano. Es importante destacar que este proceso no busca otorgar estatus político al Clan del Golfo, sino verificar su voluntad de transitar hacia el Estado de derecho.
Clan del Golfo
El máximo cabecilla de la organización, Jobanis de Jesús Ávila Villadiego, alias Chiquito Malo, hará parte de los diálogos. Además, otros representantes reconocidos también participarán, entre ellos Orozman Orlando Osten Blanco, José Gonzalo Sánchez, Elkin Casarrubia Posada, José Miguel Demoya Hernández y Luis Armando Pérez Castañeda.
La dificultad que enfrenta el Gobierno con el Clan del Golfo
Esta iniciativa surge tras varios intentos infructuosos del Gobierno Petro por establecer comunicación con el Clan del Golfo. La resolución busca superar obstáculos previos, como la falta de claridad en el marco jurídico.
Aunque la resolución ya establece algunos beneficios para los miembros del grupo, contemplando el levantamiento de órdenes de captura para quienes demuestren compromiso con el desmantelamiento de sus estructuras armadas, el desafío de estos diálogos será encontrar un acuerdo que satisfaga las expectativas de ambas partes.