
El Cesar, conocido por su asombrosa biodiversidad y alto potencial agrícola, resguarda cacao como uno de sus tesoros más preciados. De hecho, este cultivo creció exponencialmente en los últimos años, debido a la determinación y resiliencia de manos campesinas e indígenas, víctimas del conflicto armado, para quienes el cacao avivó, en tiempos de violencia, la ilusión de un mañana mejor.
Ahora bien, considerando ampliamente las incidencias sociales, ambientales y económicas de la cacaocultura en el departamento, el Gobierno del Cesar y la Embajada de Canadá, a través de Socodevi, suscribieron convenio por $430 millones, a fin de fortalecer los procesos de calidad del cacao e impulsar su posicionamiento en mercados nacionales e internacionales.
Desde luego, el acuerdo firmado promoverá que comunidades rurales y ancestrales nativas de la Sierra Nevada de Santa Marta y Serranía del Perijá, establezcan su propia marca de origen cesarense ‘Cacao, del Corazón del Mundo’.
También, concretarán lazos comerciales participando activamente en ferias y ruedas de negocio con actores claves en la cadena de valor, permitiendo el intercambio de conocimientos y experiencias que, sin duda, mejorarán la cooperación, eficiencia y productividad de la industria cacaocultora.