Las autoridades afganas elevaron este miércoles a 920 el número de muertes y a más de 600 los heridos por el terremoto de 5,9 grados registrado anoche en el este de Afganistán, mientras continúa la búsqueda de supervivientes en la mayor catástrofe desde la llegada de los talibanes al poder.
El nuevo número de fallecidos y heridos en el terremoto que afectó sobre todo a dos provincias del este de Afganistán, en la frontera con Pakistán, fue facilitado en una rueda de prensa por el viceministro para la Gestión de Desastres, Mawlavi Sharfuddin Muslim.
«El Ministerio de Defensa ha enviado un equipo médico y de socorro a Paktika. Equipo del Ministerio de Defensa y Salud Nacional en víctimas del terremoto «, traduce el mensaje del gobierno del Emirato Islámico.
El seísmo se registró la noche del martes a unos 46 kilómetros de la ciudad de Khost, cerca de la frontera entre Pakistán y Afganistán, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que informó también de una réplica de 4,5 grados.
Un portavoz del Ministerio de Respuesta y Manejo de Desastres afgano, Mohammad Nasim Haqqani, confirmó por el momento a Efe más de un centenar de muertos, «incluidos mujeres y niños», mientras anunció que se llevó a cabo una reunión con las autoridades competentes para brindar ayuda a los afectados.
Imágenes compartidas en redes sociales muestran numerosas casas destruidas y decenas de personas ayudando a rescatar víctimas en medio de los escombros en la zona montañosa.
«Anoche, cuatro distritos de la provincia de Paktika: Gyan, Naka, Barmal y Zherok, así como el distrito de Spera de Khost y las áreas circundantes, sufrieron la muerte y lesiones graves», cita el trino que comparte un video de la zona afectada.
Por ahora se mantienen las labores de socorro y según las autoridades el número de víctimas aumentará drásticamente ya que los daños son devastadores.